Arthur Sandes - Comandante del Regimiento Rifles "Libertadores del Perú" |
Sandes, Arthur (1793-1832), comandante del Regimiento Rifles en las guerras de independencia de América del Sur, nació en 1793 en Dublín, Irlanda.
Participó en la batalla de Waterloo en Bélgica. Dejó el ejército británico en 1815 y dos años más tarde se unió regimiento del coronel Federico Campbell de Cazadores (rifles).
Esta era una unidad reclutada en Londres para el servicio en Venezuela por Luis López Méndez, representante de Bolívar.
Los Rifles embarcaron hacia Venezuela en enero de 1818 como parte de la "Expedición de los cinco coroneles" de 800 hombres, pero resultaron prácticamente disueltos en las Indias Occidentales, antes de llegar al campo de batalla. No había barcos fácilmente disponibles y tampoco dinero para honrar las falsas promesas hechas en Londres. Ocurrieron además, enfermedades mortales, duelos, renuncias y deserciones.
Cuando su hijo Duncan (un oficial en servicio en su unidad) murió de una fiebre, el coronel Campbell había tenido suficiente. Él renunció a su cargo y regresó a Inglaterra acompañado de su segundo hijo, que había caído enfermo.
El comandante Robert Piggot, un irlandés, asumió el mando y finalmente llegó a Angostura el 23 de julio de 1818. pero deja el ejército poco después a causa de su mala salud.
Fue sucedido por el teniente coronel Arturo Sandes, el que comandará el regimiento Rifles en todo el resto de la guerra independentista.
Los Rifles lucharon con bravura en todos los teatros de operaciones. La columna vertebral de los británicos y los irlandeses se mantuvo constante y se aseguró su continuidad.
El Regimiento Rifles, fue la más destacada y eficaz unidad militar del ejército de Bolívar.
Después de su servicio en los llanos venezolanos durante el primer semestre de 1819, los Rifles fueron parte de la fuerza expedicionaria que en los llanos y los Andes obteniendo la liberación de la zona central de Colombia.
El Regimiento estuvo presente en Gameza donde Sandes fue herido dos veces y en Boyacá donde logró una gran victoria sobre la artillería española.
Poco después de esta batalla, estalló una epidemia en el ejército independentista. El Teniente Coronel Sandes cayó gravemente enfermo pero afortunadamente logró recuperarse.
Durante 1820 y 1821, Sandes llevó su Regimiento en operaciones continuadas en el norte de Colombia y Venezuela.
Se distinguió en las batallas de Ciénaga (10 noviembre 1820) y Carabobo (24 de junio 1821). Por desgracia, el clima resultó ser más letal que los realistas y el regimiento se redujo considerablemente en número por una epidemia que estalló en la provincia de Santa Marta, en octubre 1821.
Los Rifles fueron al sur y lucharon contra los españoles en 07 de abril 1822 en un lugar llamado Bomboná, una batalla que fue uno de los mejores momentos de la unidad. En este hecho de armas, los rifles flanquearon las posiciones realistas y después de una carga feroz de bayoneta los obligaron a retirarse del campo.
Después de la batalla, Bolivar recompensó a los Rifles 'y entre las promociones estruvo el ascenso de Sandes de teniente coronel a coronel. También el Regimiento fue rebautizado 'Rifles de Bomboná, primero de la Guardia "y todos sus miembros fueron galardonados con la ' Orden de los Libertadores", una de las pocas ocasiones durante la guerra en la que se otorgó esta condecoración a una unidad completa.
Arthur Sandes, ya de 29 años de edad, había ascendido de capitán a coronel en sólo cuatro años, una mejora meteórica.
Después de Bomboná, Sandes y los Rifles participaron en la represión de la rebelión liderada por Benito Boves en Pasto y jugaron un papel clave en las batallas de Taindala y Yacuanquer en diciembre de 1822.
En marzo y abril de 1823, el regimiento fue enviado a Perú como parte de la fuerza expedicionaria independentista dirigida por el general Sucre.
Practicamente fue Sandes y el regimiento Rifles los que materializaron la victoria final sobre los realistas.
Su momento de gloria llegó en Corpahuayco el 3 de diciembre de 1824. Como parte de las operaciones que llevaron a la decisiva batalla de Ayacucho, el ejército realista y el ejército independentista estaban realizando contínuas maniobras.
Los realistas atacaron la retaguardia, cuando las fuerzas de Sucre estaban cruzando un río. La peor parte del asalto cayó sobre los rifles que opusieron una tenaz resistencia.
Con fuerza y en inferioridad numérica, el Regimiento logró detener el avance de los realistas el tiempo suficiente como para permitir que el grueso del ejército independentista logre escapar.
Este gran sacrificio del Regimiento Rifles significó la muerte de 200 de sus miembros, incluyendo al mayor Thomas Duckbury, el segundo al mando. Otros 500 resultaron gravemente heridos, capturados o desaparecieron en acción.
Sandes y los británicos del glorioso Regimiento Rifles salvaron la vida de Sucre y del resto del ejército independentista que integraban venezolanos, colombianos, peruanos y de otras nacionalidades de sudamérica.
No habría habido ninguna victoria en Ayacucho el 09 de diciembre 1824, 3 dias después de Corpahuayco, si no hubiera sido por la valentía y destreza de los Rifles.
Como un homenaje a su demostrada valentía durante la campaña, Sandes fue ascendido a general de brigada y el Regimiento Rifles recibió el título de 'Libertadores del Perú'.
Sandes se quedó en Perú como parte de la guarnición de la Gran Colombia, siendo posteriormente expulsado del país en enero de 1827, cuando Lima derrocó al gobierno pro-bolivariano y se deshizo de sus tropas.
Fue nombrado Comandante General de Guayaquil en diciembre y en 1828 luchó en la guerra entre Perú y la Gran Colombia. Después de organizar la defensa del puerto, Sandes dirigió una de las dos divisiones grancolombianas en la batalla de Portete de Tarqui el 27 de febrero de 1829, donde obtuvo la victoria que decidió el resultado de la guerra.
Habiéndose restaurado la paz, Sandes fue nombrado Gobernador del Departamento del Azuay y se estableció en Cuenca. Murió en esta ciudad el 6 de septiembre 1832 y fue enterrado en un convento carmelita.
La Batalla de Corpahuayco ha permanecido siempre oculta, en vez de ser la más resaltada en la campaña de independencia de Perú.
Perú está en deuda con Arthur Sandes y con el Regimiento Rifles verdaderos actores de la independencia peruana.
Los realistas tenían la victoria asegurada en Ayacucho, pero quedaron con serios problemas de desabastecimiento de municiones, y sus tropas, formadas por indigenas, estaban totalmente carentes de alimentos y agua. Por su lado, los independentistas habían perdido la élite de su ejército. Por esta razón, según historiador español, ambos bandos llegaron a un preacuerdo en momentos previos a Ayacucho, donde se desarrolló solo una ficción de batalla.
Los realistas tenían la victoria asegurada en Ayacucho, pero quedaron con serios problemas de desabastecimiento de municiones, y sus tropas, formadas por indigenas, estaban totalmente carentes de alimentos y agua. Por su lado, los independentistas habían perdido la élite de su ejército. Por esta razón, según historiador español, ambos bandos llegaron a un preacuerdo en momentos previos a Ayacucho, donde se desarrolló solo una ficción de batalla.